Comenzando
este nuevo año 2014 con todo mi amor deseo compartir esta información de Conny
Méndez tan importante para nuestro diario vivir en este plano.
Aprende
la Gran Verdad: LO QUE TU PIENSAS SE
MANIFIESTA. "Los pensamientos son cosas". Es tu actitud la que
determina todo lo que te sucede. Tú propio concepto es lo que tú ves, no
solamente en tu cuerpo y en tu carácter, sino en lo exterior; en tus
condiciones de vida: en lo material, sí, tal como lo oyes. Los pensamientos SON
COSAS. Ahora verás.
Si
tú tienes costumbre de pensar que eres de constitución saludable, hagas lo que
hagas, siempre serás saludable. Pero cambias tu manera de pensar; te dejas
infundir el temor de las enfermedades y comienzas a enfermarte. Pierdes la
salud. Si naciste en la riqueza, es posible que siempre seas rico; a menos que
alguien te convenza de que existe "el destino" y comiences a creer
que el tuyo puede cambiar de acuerdo con los "golpes y reveses"
porque así lo estás creyendo. Tu vida, lo que te ocurre, obedece a tus creencias
y a lo que expreses en palabras. Es una ley. Un principio ¿Sabes lo que es un
Principio? Es una ley invariable que no falla jamás. Esta ley se llama EL
PRINCIPIO DE MENTALISMO.
Si
en tu mente está radicada la idea de que los accidentes nos acechan a cada
paso; si crees que "Los achaques de la vejez" son inevitables; si
estás convencido de tu mala o buena suerte; lo que quiera que tu esperes
normalmente, en bien o en mal, esa es la condición que verás manifestase en tu
vida y en todo lo que haces. Ese es el por qué de lo que te ocurre.
No
se está jamás consciente de las ideas que llenan nuestra mente. Ellas se van
formando de acuerdo con lo que nos enseñan, o lo que oímos decir. Como casi
todo el mundo está ignorante de las leyes que gobiernan la vida, leyes llamadas
"de la Creación", casi todos pasamos nuestra vida fabricando.
las
condiciones contrarias; viendo tornarse malo aquello que prometía ser tan
bueno; tanteando, como quien dice, a ciegas, sin brújula, timón, ni compás;
achacándole nuestros males a la vida misma, y aprendiendo a fuerza de golpes y
porrazos; o atribuyéndoselos a "la voluntad de Dios".
Con
lo que hasta aquí has leído, te habrás dado cuenta de que el ser humano no es
lo que le han hecho creer, o sea, un corcho en medio (te una tempestad, batido
aquí y allá según las olas ¡¡Nada de eso!!.... Su vida, su mundo, sus
circunstancias, todo lo que él es, todo lo que le ocurre son creaciones de él
mismo y de nadie más…. El es el rey de su imperio y si su opinión es,
precisamente, que él no es sino un corcho en medio de una tempestad, pues así
será…. Él lo ha creído y permitido.
Nacer
con libre albedrío significa haber sido creado con el derecho individual de
escoger…. Escoger ¿qué? El pensar negativa o positivamente…. Pesimista u
optimistamente. Pensando lo feo y lo malo —qué produce lo feo y lo malo— o
pensando lo bueno y bello, que produce lo bueno y bello en lo exterior o
interior.
La
Metafísica siempre ha enseñado que lo que pensamos a menudo pasa al
subconsciente y se establece allí actuando como reflejo. La psicología
moderna, al fin, lo ha "descubierto".
Cuando
el ser humano se ve envuelto en los efectos de su ignorancia, o sea que se ha
producido él mismo una calamidad, se vuelve hacia Dios y le suplica que lo
libre del sufrimiento.
En
este último caso es cuando sus familiares lo consuelan diciéndole que
"hay que resignarse ante la voluntad de Dios"… Es decir, que todos
dan por sentado que la voluntad del Creador es mala Pero al mismo tiempo, la
religión enseña que Dios es nuestro Padre…. Un Padre Todo Amor Bondad,
Misericordia. Todo Sabiduría y Eterno ¿Estás viendo cómo no concuerdan estas
dos teorías? Te parece de sentido común que un padre todo amor, e infinitamente
sabio, pueda sentir Y expresar mala voluntad hacia sus hijos?... Nosotros,
padres y madres mortales, no seríamos jamás capaces de atribular a ningún hijo
con los crímenes que le atribuimos a Dios!... ¡Nosotros no seríamos capaces de
condenar a fuego eterno a una criatura nuestra, por una falta natural de su
condición mortal, y consideramos que Dios es capaz!... Es decir, que sin que
nos demos cuenta clara de ello, le estamos atribuyendo a Dios una naturaleza
de magnate caprichoso, vengativo, lleno de mala voluntad, pendiente de nuestra
menor infracción para atestarnos castigos fuera de toda proporción!...
Es
natural pensar así cuando nacimos, vivimos ignorando las reglas y las leyes
básicas de la vida.
Ya
dijimos la razón de nuestras calamidades. Las producimos con el pensamiento. En
esto es que somos "imagen y semejanza" del Creador.
Somos
creadores. Los creadores, cada cual, de su propia manifestación.
Ahora,
¿por qué es que Dios parece atender a veces, y otras no? Ya verás. La oración
es el pensamiento más puro y más alto que se puede pensar. Es polarizar la
mente en el grado más altamente positivo. Son vibraciones de luz que lanzamos
cuando oramos, o sea, cuando pensamos en Dios. Esas vibraciones tienen que
transformar instantáneamente, en perfecto y bello, todas las condiciones
oscuras que rodean, como cuando se lleva una lámpara a una habitación que esté
en tinieblas. Siempre que el que esté orando piense y crea que ese Dios a quien
le pide es un Padre amoroso que desea dar todo lo bueno a su hijo. En ese caso.
Dios siempre "atiende"… ¿Pero cómo, por lo general, la humanidad tiene
costumbre de pedir así:
"Ay, Papá Dios, sácame de este apuro, que
yo sé que vas a pensar que no me conviene porque tú quieres imponerme esta
prueba"…! En otras palabras, ya negó toda posibilidad de recibirlo. Tiene
más fe en ese Dios que nos enseñaron, caprichoso, vengativo, lleno de mala
voluntad, que no está sino atisbando a que cometamos la primera infracción
para atestarnos castigos de una crueldad satánica! Pues el que así pide no
recibe sino de acuerdo a su propia imagen de Dios. Es tan sencillo como te lo
digo. Ahora no vuelvas a olvidar jamás que la voluntad de Dios para ti es el
bien, la salud, la paz, la felicidad, el bienestar, todo lo bueno que El ha
creado. No vuelvas a olvidar jamás que Dios no es ni el juez, ni el policía, ni
el verdugo, ni el tirano que te han hecho creer. La Verdad es que El ha creado
siete leyes. Siete Principios que funcionan en todo y siempre. No descansan un
solo minuto. Se encargan de mantener el orden y la armonía en toda la Creación.
No se necesitan policías en el espíritu.
Aquel
que no marcha con la ley se castiga él mismo. (Lo que piensas se manifiesta de
manera que aprende a pensar correctamente y con la ley para que se manifieste
todo lo bueno que Dios quiere para ti).
San
Pablo dijo que Dios está más cerca de nosotros que nuestros pies y nuestras
manos, más aún que nuestra respiración; de manera que no hay que pedirle a
gritos que nos oiga. Basta con pensar en El para que ya comience a componerse
lo que parece estar descompuesto. El nos
creó. El nos conoce mejor de lo que nos podemos conocer nosotros. El sabe por
qué actuamos de esta o aquella manera, y no espera que nos comportemos como
santos cuando apenas estamos aprendiendo a caminar en esta vida espiritual.
Voy
a rogarte que no creas nada de lo que te estoy diciendo sin primero
comprobarlo. Es tu derecho divino y soberano. No hagas lo que has hecho hasta
ahora, aceptar todo lo que oyes y todo lo que ves sin darte la oportunidad de
juzgar entre el bien y el mal.
Gracias.
Gracias. Gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario