lunes, 13 de agosto de 2012

El tamaño de los Seres humanos y que nos enseñan en el transitar por la vida






Leyendo en una de mis páginas de las cuales disfruto mucho porque son un aprendizaje constante en mi vida, encontré este artículo y me disculpa la persona ya que no guarde su nombre pero incluí muchas cosas que he aprendido las cuales comparto con todos ustedes.  Quiero expresar lo grande de esas personas entre ellas mi Padre Juan Francisco Martínez, que ya no está en este plano el cual fue digno de admiración y fue mi  primer y gran Maestro al igual que mi madre que tampoco esta físicamente. Los Tamaños de las personas  varían conforme el grado de compromiso que se adquieran…

Una persona es monumental, cuando habla de frente y vive de acuerdo a lo que habla, cuando trata con cariño y respeto, También recuerdo a otro gran Maestro Médico dedicado a la medicina natural que miraba a los ojos y sonría de manera inocente, como un niño grande. Al cual le estoy inmensamente agradecida por haber sido gran “Amigo Espiritual de mi padre”, así como ellos muchos maestros he tenido en la vida que ya se han ido como Alicia Gómez, mi hermana y amiga de la vida la cual me dejó grandes enseñanzas para seguir mi misión de vida.

También he conocido lo pequeñez de los seres humanos cuando solo se piensa en sí misma, y le hace creer a los otros que piensa en ellos, cuando se comporta de una manera poco gentil, grosera, mentirosa e interesada, cuando no sientes su  apoyo, cuando abandona a alguien justamente en el momento en que tendría que demostrar lo que es más importante entre dos personas: La Amistad, El Compañerismo, El Cariño, El Respeto, El Celo y, así mismo, EL AMOR..

Una persona es gigante cuando se interesa por tu vida, cuando busca alternativas para tu crecimiento, cuando sueña junto contigo… Cuando trata de entenderte aunque no piensen igual. Una persona es grande cuando perdona, cuando comprende, cuando se coloca en el lugar del otro, cuando obra, no de acuerdo con lo que esperan de ella, pero de acuerdo con lo que espera de sí misma.

Una persona es pequeña cuando se deja regir por comportamientos clichés. Cuando quiere quedar bien con todos, cuando maneja a la gente como un titiritero incluso amenazando sin motivos, lamentablemente siempre hay gente que no tiene convicciones y se deja manejar incluso por su EGO…. Una misma persona puede aparentar grandeza o pequeñez dentro de una relación, puede crecer o disminuir en un corto espacio de tiempo.

Una decepción puede disminuir el tamaño de un amor que parecía ser grande. Una ausencia puede aumentar el tamaño de un amor que parecía ser ínfimo. Una decepción puede terminar con el respeto por alguien. Una acción correcta puede enaltecer a otros.
 
 Es difícil convivir con esta elasticidad: las personas se agigantan y se encogen a nuestros ojos. Ya que nosotros juzgamos a través de centímetros y metros, en vez de acciones y reacciones, de verdades o falsedades de expectativas y frustraciones.

Una persona es única al extender la mano, y al recogerla inesperadamente, se torna otra. El egoísmo unifica a los insignificantes, a los perdedores, a los falsamente llamados diplomáticos. No es la altura, el apellido,  ni el peso, ni la belleza ni un título o mucho dinero lo que convierte a una persona en grande… es su honestidad, su decencia…su amabilidad y respeto por los sentimientos e intereses de los demás. Por su sensibilidad sin tamaño…

Con inmenso amor y servicio.